Crónica Salida Extraordinaria de Nuestro Padre Jesús Nazareno

Éste pasado sábado nuestra ciudad vivía otra jornada especial, como cada vez que el Señor de Vera recorre las calles de la MN y ML Ciudad de Vera, pero, a diferencia de esos días de Cuaresma o de Semana de Pasión, en esta ocasión se trataba además de un hecho histórico en nuestra Real Archicofradía y en nuestra ciudad de Vera.

Nuestro Padre Jesús Nazareno instantes antes de comenzar el traslado
Foto: D. Antonio Ramírez

Detalle de mantolín de corneta de
Santa Ana de Dos Hermanas
Foto: D. Antonio Ramírez

La jornada comenzaba a las 17:15 horas con unas palabras del Sr. Consiliario de nuestra Real Archicofradía, y a su vez Sr. Cura-Párroco de nuestra ciudad, D. Carlos María Fortes quién se dirigió a los miembros de la Junta de Gobierno y hombres de trono del Señor antes de que, tras el rezo de un Padre Nuestro, D. José María Simón, Sr. Capataz del Señor, ordenase bajarlo de su camerin y, por fin, salir a la Glorieta a los sones del Himno Nacional interpretado por la Banda de Música de Dos Hermanas "Santa Ana", quienes, por cierto, acompañaron con rezos musicales la jornada como si del sonido de los ángeles se tratase.

Una vez en su paso y ya descansando sobre los hombros de su cuadrilla de portadores el Señor de Vera. imponente como siempre, echaba andar por su Glorieta a los sones de "Nuestro Padre Jesús" como al alba de cada Viernes Santo: imponiendo su presencia aunque con una luz diferente, la del sol en las tardes de San Ramón.

Ntro. Padre Jesús Nazareno abandonando San Ramón
Foto: D. Antonio Ramírez

Ya en calle La Plata la chicotá, con "Procesión de Semana Santa en Sevilla", para arriar antes de abandonar el barrio por unas horas. Llamada de campana y levantá para revirar en La Plata con Mayor con el canto litúrgico "Triunfal". Ya en calle Mayor el Señor avanzó en dos chicotás hasta la Plaza Mayor sonando por parte de Santa Ana las marchas "Valle de Sevilla" y "Jesús de las Penas". A las 18:20, aproximadamente, el Señor de Vera entraba en Plaza Mayor en una difícil maniobra hacia atrás con la marcha "Pasan los Campanilleros". Tras la magnífica chicotá el Señor era bajado de su paso y entraba, a los acordes del Himno Nacional, a la Iglesia Parroquial de Ntra. Sra. de la Encarnación, donde a continuación se celebró Santa Misa.

El Señor de Vera entrando en Plaza Mayor
Foto: D. Antonio Ramírez

La eucaristía, oficiada por el Sr. Cura-Párroco de nuestra ciudad, se celebró con una parroquia abarrotada y la participación del Coro de San Ramón. Tras comulgar el Sr. Alcalde-Presidente de nuestra ciudad, D. Félix M. López Caparrós, dirigió unas palabras y concedió la Medalla en Oro de la ciudad de Vera a Nuestro Padre Jesús Nazareno. Además, los jóvenes hermanos de la Hdad. Juvenil Virgen de los Perdones obsequiaron con un pin de la su Hermandad a nuestro Sagrado Titular.

Palabras del Sr. Alcalde-Presidente durante la Santa Misa

AM Virgen de las Mercedes abriendo el cortejo
Foto: D. Antonio Ramírez

Eran las 19:40 horas cuando la Cruz de Guía abandonaba la Iglesia Parroquial acompañada por los sones de la AM Virgen de las Mercedes de Oria que abrió el cortejo de la salida extraordinaria. A continuación fueron salieron todas autoridades cofrades, militares y civiles, junto a nuestra Junta de Gobierno, que formaban el cortejo para que, nuevamente y sobre las 19:55 horas, Nuestro Padre Jesús Nazareno abandonase el principal templo de la ciudad.

Ya en su paso el Señor comenzó la procesión extraordinaria revirando en calle Mayor con la marcha clásica "Rocío", para deleite de los presentes.
Tras abandonar la Plaza Mayor una nueva chicotá con la magnífica marcha "Triana, Tu Esperanza".
Siguiente chicotá revirando en Mayor con Angustias y el Señor, con su elegante caminar, avanzaba con la marcha "Margot". Nueva chicotá hasta arriar en calle Jacinto Anglada con "María Stma. del Subterráneo". Seguidamente revirá, entre las calles Jacinto Anglada y del Mar (Terraza Carmona), con la bellísima marcha "Cirineo" de nuevo interpretada con majestuosidad por parte de Santa Ana de Dos Hermanas.

Vídeo del traslado con las marchas "Nuestro Padre Jesús" y "Triunfal"

Levantá del Señor a escasos metros de la casa de su Madre, de nuestra Patrona, la Virgen de las Angustias quién esperaba bajo el dintel de su ermita. Justo a la altura de ella, y en silencio, el Señor se detenía y era bajado "a muslo" por orden de su Sr. Capataz para guardar un emotivo minuto de silencio en éste encuentro inesperado entre Madre e Hijo. Transcurrido el silencioso encuentro de nuevo el Señor a los hombros de su cuadrilla y chicotá avanzando por calle del Mar con "A Tí, Manue".

Dos chicotas más por calle del Mar, una corta a tambor y otra para revirar hacía calle Juan Anglada (conocida por todos como calle del Aire) con lar marcha clásica "Saeta Cordobesa".
Ya en calle Juan Anglada, muchos años después, el Señor avanzó lentamente con la marcha "La Madrugá" de nuevo en busca del corazón de la ciudad.
Revirá en espacio justo para volver a calle Mayor, ya de vuelta al barrio, sonando la marcha "Hosanna in Excelsis" resultando uno de los momentos más bonitos de la noche por la dulzura del Señor en la revirá y el esfuerzo de su cuadrilla en la difícil maniobra.

Instantes del Señor de Vera
Foto: D. Antonio Ramírez

Dos chicotás más, una a tambor y otra con con "Ntra. Sra. del Patrocinio" para bajar a Plaza del Sol y revirar hasta quedar el Señor arriado en calle del Sol.
Tras dos chicotás cortas a tambor salvando las dificultades de la vía, el Señor reviró en lo alto del Barrio de Jesús con la marcha "Danos la Paz" quedando arriado en calle San Ramón. Bajada lenta desde lo alto del barrio con la marcha "Amarguras".

Justo en ese instante comenzó una lluvia moderada que impidió que el Señor continuara el itinerario previsto, ésto era bajar por La Plata y subir por San Sebastián como antiguamente volvía el Señor, teniéndose que romper el cortejo y tomar el Señor a paso rápido dirección a San Ramón, que estaba a cincuenta metros, y encerrarse definitivamente, siendo las 22:45 horas de la noche aproximadamente. Así, y a pesar de que la lluvia nos privó de vivir los últimos instantes y más sentimentales por las calles del barrio y el regreso a nuestra sede canónica, finalizó una gloriosa jornada en nuestra Real Archicofradía.